Por fin, la paz es posible
Esperamos que este proceso de paz se sostenga y amplíe para también integrar a él los grupos que, de una forma u otra, se han dedicado al tipo de actividad que impide la paz y el desarrollo normal del potencial nacional y de la seguridad de sus ciudadanos.
Quedan tareas por cumplir, por ejemplo, la integración al marco social productivo de personas que han sobrevivido en la clandestinidad y realizado actos considerados ilícitos mientras formaban parte de la rebelión. Esto resultará vital para la normalización final del país.
Esperamos que efectivamente esta grata noticia se convierta en el inicio de una etapa para desarrollar el enorme potencial que posee Colombia y en el fin de la zozobra que por tantas décadas ha afectado la calidad de vida de los colombianos.
Colombia, por su sacrificio, paciencia y valor, merece esta oportunidad de re-inventarse. Para eso cuenta con nuestro apoyo.
Rubén Blades
26 Septiembre, 2016